viernes, 14 de enero de 2005

Star Wars: 'coleccionismo freakie'

El Lado Oscuro de la Fuerza pervive incluso en las patatas, una maldad tubércula al alcance de los coleccionistas más 'freakies' de la famosa saga creada por George Lucas. Y es que el Lado Oscuro de los Sith es tan atractivo que hasta Mr. Potato ha optado por pasar a ser Darth Tater, mucho más amenazante, seducido también por la tentación del emperador Palpatine.
Playskool ha lanzado este muñeco actualizado en versión galáctica con todo tipo de complementos, inlucida la espada láser.
(Extraído de aquí)

Polémica amarilla y lingüistica

Mandarín, hsiang, kan, hakka, wu, fukienés y cantonés. Posiblemente os suene a chino. Y sí, así es. Son los dialectos chinos que están provocando una auténtica guerra en el costado más oriental del mundo, como cuando vemos en congreso chinos a pequeños señores de ojos rasgados golpeándose incesantemente, con gafas saltando por los aires, papeles volando y policías que parecen sonreír sempiternamente procurando separar la tangana. La filosofía taoísta no sirve de nada cuando a un chino se le enciende la mala hostia.
El enfrentamiento esta vez ha llegado procedente de un asunto que a los occidentales nos deja un poco perpelejos. Han prohibido emitir por televisión los dibujos animados de Tom y Jerry por el conflicto de dialectos en los que hablan. El gobierno chino quiere imponer el mandarín como lengua nacional (el 70% de China lo habla), pero los reductos de otras lenguas milenarias se oponen y niegan a esta normativa nacional. Si os habéis parado a pensar, esto es absurdo ¿Por qué? Porque Tom y Jerry ¡¡no hablan en los dibujos originales!! Aunque esto no es óbice para sí que lo hagan en China. Doblados a los dialectos regionales, los dibujos animados del gato y el ratón han sido grandes éxitos televisivos. Pero el gobierno central, que por décadas promovió el mandarín, ha ordenado poner fin a toda transmisión en dialectos, por considerar que los chinos deben ser criados en un “ambiente lingüístico favorable”.
El debate acerca de cómo mantener la cohesión nacional en medio de un mar lingüístico de acentos regionales, dialectos y grupos idiomáticos totalmente separados es el tema de actualidad en China, donde hay partes divididas y mucho enfado entre unos y otros. El gobierno dice que la política sobre el mandarín es vital para promover una identidad nacional en una nación de 1.300 millones de habitantes, 56 grupos étnicos y 7 dialectos principales.
De lo que no se han dado cuenta es que si esto les ha pasado es por andar tocando los originales poniéndoles vocecitas chillonas. Como diría alguien de cualquier barrio en algún lugar de España: “es que estos chinos…”.

jueves, 13 de enero de 2005

'La azotea de Wyoming', fidelidad a un estilo de resultados desiguales

Esperado fue el resultado del estreno de Guayo en la televisión público. Repitió la fórmula de ‘El peor programa de la semana’, pero sin concebir sorpresas negativas ni positivas. El Gran Wyoming dio lo que se esperaba en el nuevo programa de TVE ‘La azotea de Wyoming’, un programa dirigido por Rafael Galán lanzando como un ‘late night’ diferente, comprometido, que acude a la actualidad con un humor intelectual, astuto, ácido y sarcástico a la vez, con un sedimento social y una buscada fascinación por la contravención substancial de sus contenidos.
No fue una sorpresa para los que conocen la forma de trabajar de Wyoming, que ha hecho lo que se aguardaba: un programa creado en una esfera de libertad. Aunque si bien es cierto que empezó su inauguración con cierta rigidez humorística y donde todas las secciones parecieron un producto de pruebas y no de algo sólido como se le exige al mejor comunicador que tenemos en España, ‘La azotea de Wyoming’ no faltó al humor inteligente, a la imagen de iconoclasta y protagónica que presuponíamos, con críticas mordaces respaldadas en el compromiso para con sus seguidores. Pero faltó algo, lucimiento, tal vez, tersura catódica de esa que sólo dar al público el Gran Wyoming. La poca garra, la falta de magia de algunos de sus apartados fueron un error enmendable que, como gran veterano, Guayo procurará mejorar en las siguientes ediciones de este nuevo programa que, ante todo y eso sí, es una alternativa diferente a cualquier otra propuesta, que no elude su etiqueta de ‘show de riesgo’. Algo que va unido a la figura mediática que representa Wyoming. La respuesta por parte del público fue, como era de esperar también, bastante carente de interés por debajo de Sardá (qué miedo tiene el Rey de la televisión actual) y un Buenafuente que sigue su progresión ajeno a derrocamientos y absurdas pugnas nocturnas por la audiencia. Sin embargo, Wyoming demostró estar en plena forma, siendo como es él, como ha sido siempre, fiel a sus principios. Y esa es la sobresaliente y gran fortaleza de un programa que dará algunos de los mejores momentos de la tele moderna.
Para no seguir un sesudo análisis del nuevo espacio de la cadena pública, haré un breve recorrido por sus secciones desplegando una pequeña opinión sobre ella. Si os gusta, bien. Si no, bien también que soy yo el que escribe.
Guayo empezó dando caña al PSOE, prescindiendo de la frase de ‘no muerdas la mano del que te da de comer’. Crítico e irónico, Wyoming no tiene límites, ni amos a los que someterse, y esa declaración de libertad le honra, aunque es un riesgo que puede considerarse innecesaria. Y sí, el gran presentador parecía algo contraído, bastante nervioso, pero fue soltándose como es habitual en él.
Los ‘sketchs’ recordaron lo mejor de ‘El peor programa…’. El de la boda cristiana ajustada a los ideales de un concurso televisivo como el ‘Un, dos, tres…’ fue sencillamente maravilloso, lo mejor de la noche. O el de 'El mundo inalcanzable' o el 'Fuck the president'. También ese residuo de gamberrismo díscolo, perpetuado en el eslogan ‘Cuando todo da lo mismo, dedícate al onanismo’. Perfecto. Puro humor bizarro que se echaba de menos.
Si por algo se esperaba (por lo menos yo) este programa era por esa personal conducta que posee Wyoming para hacer entrevistas, restando peso en las preguntas comprometidas y dándole trascendencia a lo trivial, encontrando un equilibrio perfecto entre circunspección y espectáculo. Imanol Arias asistió a la biografía más surreal que le han hecho en televisión y departió siempre politizando sus palabras para dejar que Carlinhos Brown (actuación en directo incluida) con su altruismo musical y vital y, sobre todo, el escritor Gervasio Sánchez cedieran lo mejor en este apartado de preguntas y respuestas. Sobre todo, aplaudo los cojones de Guayo por sacar a este hombre y sus experiencias con ‘los niños soldados’ sin ningún morbo, siempre desde la curiosidad de un magnífico entrevistador. Buenos momentos de comedia como ese sarcástico ‘Rincón de la cultura’ con Wyoming enseñando a abrir y disfrutar un libro, un hecho que, a estas alturas, parece que requiere este tipo de instrucciones o el nostálgico reencuentro con un Pedro Reyes que evoca aquellos maravillosos 80 catódicos (más que por la calidad de sus chistes).
Donde claudicó al aburrimiento esta azotea fue en las secciones delimitadas a tratar la actualidad. El personaje de Notizia Ortiz (una actriz de muy buen ver, por cierto) junto al presentador leyendo una serie de crónicas resultó de los más estático y prototípico. Al igual que esa insoportable rata con la voz de un Moncho Alpuente que sobresale con más efectividad crítica cuando da la cara y no está tan ceñido a un guión. Las apariciones de la rata Ramón fueron lo más negativo y deprimente de esta nueva aventura televisiva de Wyoming. Velilla Valbuena, pésima actriz y peor cómica, también entra en el saco de lo execrable, por muy buena que esté la muchacha de pelo rizado, sugerentes curvas y lozano rostro. En cuanto a la banda de música, dirigida por el indispensable Reverendo, estuvo en todo momento incorpórea, sin más protagonismo que el de los intervalos entre espacio y espacio y los momentos precedentes a la publicidad. Sin mucho que comentar al respecto. Tampoco de lo zafio de la iluminación y el decorado, bastante pobre y anodino. Pero en este tipo de programas no importa el boato, sino el contenido.
Este primer ‘La azotea de Wyoming’ fue desigual, no se puede negar. Pero aún así, dentro de esta nueva televisión de alternativas con la que ha empezado 2005 supone un paliativo a tanta basura que nos han hecho tragar a lo largo de los años. Y lo más importante, el Gran Wyoming no decepcionó. Simplemente fue él mismo, una lealtad inconfundible que provocará cambios en aquello que no funcione y hará de este nuevo espacio lo que muchos esperan, sino lo que en realidad tiene que ser: una puerta abierta al tratamiento de la actualidad desde la siempre acertada perspectiva de un Wyoming que sigue demostrando ser el número uno de los ‘showmen’ de este país.

Nuevas modalidades de jugar al baloncesto

¿Que te aburres jugando a tu deporte favorito? ¿Quieres nuevas sensaciones a la hora de lanzar a canasta? ¿Necesitas motivación para que tus triples vayan directos a aro?
No te preocupes, ya está aquí este curioso tablero de baloncesto con el que tus obsesiones sicalípticas con 'piercings' y el deporte se aunan en una extraña fusión tan jaranera como eficaz.
A esto sí que se le puede llamar 'pasárselo teta'.

Ramalazo nazi en la corona británica y el fútbol italiano

Cuando he visto al príncipe Harry de Inglaterra vestido con el uniforme nazi a lo Rommel me he quedado a cuadros y he pensado lo mismo que Arthur Edwards, prestigioso periodista inglés: "Este chaval es un soplapollas y un estúpido". Vale que sea un díscolo, que le dé vida a la prensa rosa dando hostias a los reporteros de la prensa gráfica, que fume marihuana, que beba en ingentes cantidades hasta caer redondo, pero disfrazarse de nazi en una fiesta amiguetil…
El diario londinense 'The Sun' publica en su edición de hoy una fotografía suya disfrazado de nazi. El tabloide británico lleva en su primera página la foto del hijo menor de Carlos de Inglaterra, príncipe de Gales y tercer heredero del trono del Reino Unido, con un uniforme en cuyo brazo lleva una cruz esvástica, símbolo del régimen nacionalsocialista. Menudo gañan que tienen como príncipe en Inglaterra. Ha pedido disculpas, evidentemente, pero muchos están seguros de que ha sido algo estudiado, un desafío premeditado en memoria de sus antepasados vinculados al movimiento y la cercanía del 60 aniversario del fin de Auschwitz. El diputado laborista Doug Henderson le ha puesto a parir, como era de esperar.
Lo que ya no es tan normal es esta nueva ola de neonazis famosetes, ya que el otro día, sin ir más lejos, el capitán del Lazio, Paolo Di Canio tuvo la feliz idea de festejar un gol alzando el brazo derecho imitando lo que fue el saludo nazi. Él, como es su deber, lo ha negado, pero sus tatuajes de tendencias ultraderechistas, como el que lleva brazo derecho, con la palabra “Dux”, “Duce” en latín, el apelativo con que se conocía a Mussolini, le van a hacer pagar una multa sin precedentes por hacer apología del nazismo. La pregunta es ¿qué coño está pasando aquí?

miércoles, 12 de enero de 2005

Lección televisiva de Buenafuente

La verdad es que se veía venir. Yo, al menos, lo aguardaba. Y es que anoche Andreu Buenafuente estuvo a la altura, dignificó eso que Sardá llamó un día ‘late show’ y que ha terminado reduciéndolo a un gatuperio de despropósitos, de gente insultándose en la misma mesa, encumbrando gentuza deplorable y suministrando al espectador lo más ignominioso del ser humano irradiado en esa fauna funesta, sin fondo, de una vulgaridad vejatoria para la inteligencia.
Pero la tormenta ha llegado a su fin, o por lo menos, hay claros en los nubarrones que se han cernido a lo largo de los años en el ocio catódico nocturno. El salto de Andreu Buenafuente a la televisión nacional concedió a Antena 3 el 26% de cuota de pantalla de la franja nocturna. No es mucho, pero es un triunfo para el presentador catalán. Por primera vez en muchos, un ‘late show’ hizo sombra a Sardá. Por primera vez en mucho tiempo me reí viendo un programa de estas características, disfruté de su humor fresco e ingenioso, de sus ‘gags’, de la estructura simple y directa, de ‘La casa de tu prima’, su ‘sketch’ socarrón sobre los ‘realities’, que llegó a sintetizar de tal forma lo que ha venido siendo la historia de este género que más que una situación cómica, pareció una lección de condensación, de simplificación con cuatro frases estúpidas, tres personalidades y una inventiva lúcida digna de alabar. No sé si os dio por ‘zappear’, por comparar qué ofrecía Telecinco. Y fue absolutamente impresionante, dantesco. Mientras el humor, el buen rollo, la agilidad y el ritmo florecían en Antena 3 de la mano de Buenafuente, la reiteración, el insulto y la desfachatez volvían a ser la tónica arraigada a ‘Crónicas Marcianas'.
Por un lado, el periodista de Reus entrevistaba a Antonio Gala, que habló de fraternidad, de alegría, de vida, de literatura con ese estilo aristocrático y refinado tan habitual en él, concediendo rupturas simpáticas con la aparición de los Estopa y Santi Millán. Por el otro, Boris disfrazado de ridículo y patético Alejandro Magno se entrecruzaba en una mesa donde Natacha, la argentina liberal de 'GH' increpaba a una Silvia Fominaya que no dejaba de ultrajarla, cebándose en su supuesta prostitución y malos tratos por parte de su orejudo primo allí presente, riendo la increíble caricaturización de un Carlos Latre que poco puede hacer ya por el show.
Inteligencia y luminiscencia humorística contra la zafiedad y el oprobio ¿Es tan difícil elegir?
Pero más allá de la audiencia está la calidad, que es algo que habíamos empezado a olvidar en la franja horaria nocturna. Se trata de confeccionar un producto que convenza a los más exigentes, a aquellos que no sólo viven de narcolepsia televisiva, de vida, de humor, de un poquito de calidad, por favor. El humor necesita reírse de algo tangible, necesita un elemento de referencia y ‘Buenafuente’ ayer dio una lección de humor cínico, de monólogos autoparódicos, de buen gusto, de originalidad. Un elemento tan insoluble en la caja tonta que nos asola actualmente.
Y hoy, ‘La azotea de Wyoming’, sin duda alguna, el lenitivo que todos llevábamos años pidiendo. Guayo, no nos falles.
¿Está la televisión cambiando? La respuesta, de momento, es sí. Y que siga así.

Del 20 al 22 enero, Cine Fantástico y Ciencia Ficción en Madrid

Bueno, como muchos de vosotros sabéis (y a los que no, os lo cuento), del 20 al 22 de enero, en el madrileño cine Palafox acogerá la Muestra de Cine Fantástico y Ciencia Ficción organizada por Calle 13, el canal de suspense y acción producido por Universal Studios.
Ya iba siendo hora de que gente con inquietudes se lanzara a la aventura de promover este tipo de fines de semana que, a buen seguro, será una cita ineludible con películas que, por lo menos, despertarán el interés entre el público aficionado al género: ‘Blade Trinity’, ‘Code 46’, ‘Atomik Circus’, ‘Primer’, ‘Robot Stories’, ‘Steamboy’, ‘Elektra’, ‘Equilibrium’, ‘Dreamship surprise – Periode 1’, el montaje del director de ‘Donnie Darko’ (posiblemente esté en persona) serán las películas que compongan una atractiva muestra que harán del fin de semana algo especial.
Me he dejado una de las películas destacadas de la selección para dedicarle un espacio exclusivo. Se trata de ese gran amigo y mejor cineasta que es Eugenio Mira y su ‘truope’, que también estarán presentes en esta muestra de cine fantástico con ‘The birthday’, un filme especial, como bien sabéis, en este blog y que, por fin, y por primera vez en España hasta que se cierre su distribución y tenga fecha de estreno, podrá disfrutarse después de su estreno internacional en el Festival de Sitges (donde ganó el premio a la mejor dirección artística). Mis ganas son tan inmensas por ver esta película como las de reencontrarme con Eugenio y su gente. Es una oportunidad de lujo para poder ver la comentada 'opera prima' de este precoz visionario de nuestro cine.
Sé con certeza (porque estaré en Madrid el fin de semana entero para disfrutar de este breve festival de cine de género) que la cinta de Mira se proyectará el próximo día 22 de enero, sábado, a las 20:30 en el cine Palafox.
Todo la muestra tendrá lugar en el cine Palafox, C/ Luchana nº 15 (metro Bilbao, líneas 1 y 4). El tema entradas (a 4 eurines cada peli) está de la siguiente manera. Hay dos opciones; una, directamente en taquilla o bien en la páginas www.entradas.com.
Durante los tres días que dura la muestra, las sesiones irán desde las cinco de la tarde hasta la madrugada y todas las películas se proyectarán en versión original subtitulada.
¿Qué más podemos pedir los aficionados?
Ya os digo que yo me dejaré caer por algunos de los pases, por lo que esos tres días colgaré el cartel de ‘Cerrado’ en la weblog.
Así que si vais por allí, nos vemos en Madrid.

AVN Awards 2004 ¡¡We love you, Jenna!!

Uno de los eventos más importantes del año de un género predilecto de aquellos que veneramos el noble arte del descarrío sicalíptico manual tuvo lugar en la noche del 8 de enero en el lujoso hotel The Venetian Hotel & Casino Ballroomsde, en Las Vegas, como cada año. Me refiero a la entrega de los premios AVN 2004, es decir, como si habláramos de los Oscars del cine para adultos.
Mi gran diosa onírica junto a Tera Patrick, Jenna Jameson, ambas situadas por la naturaleza en esa categoría de mujeres diseñadas para que un hombre babee en su presencia, fue con todo el merecimiento la gran triunfadora de la gala, esta vez reconvertida la espectacular rubia en una preciosa morenaza con el pelo recogido en una enorme flor. Tres premios individuales: mejor actriz del año en una película de cine, mejor actriz en una escena hetero y mejor actriz en una escena lésbica. Es la mejor en todos los terrenos. Sus películas ‘The Masseuse’ y ‘Bella Loves Jenna’ fueron igualmente las grandes ganadoras de la noche. Las películas de Jenna se alzaron hasta con 15 galardones de estos Oscars del cine porno (en todos sus ámbitos, pero donde prevalece el subgénero ‘chic’).
Hubo buenas noticias para el cine X español, ya que Narcís Bosch obtuvo el mejor premio al director extranjero con su primer lanzamiento internacional. Otras jaquetonas que se llevaron premios en esta gala llena de glamour, tacones altos, grandes pechos siliconados y explicitud corporal fueron la Katsumi, una estrella pornoeuropea poseedora de una extraña belleza mezcla de sus raíces francesas y vietnamitas, así como la pizpireta Cytherea, que se llevó el de mejor novata del año y la gran Lauren Phoenix. Entre los maromos de ‘tres piernas’, destacaron los siempre aguerridos Manuel Ferrara y el marido de la Jamesson, Justin Sterling que se llevaron sendos galardones a los mejores actores genéricos en distintas categorías.
El momento emotivo vino dado cuando Paul Fishbein, fundador de los AVN dedicó un sentido homenaje a dos grandes hombres del medio que nos dejaron en 2004: el gran Russ Meyer, creador de películas ‘sexploitation’ y dinamitadoras de la moral falsaria yanqui ("Sus defensas legales prepararon el terreno para los cineastas de cine porno contemporáneos") y Jim Holliday, el fenomenal historiador del cine X y director de grandes gestas pornofilas.
El humor, cómo no, procedió de ese genio de cuerpo fondón y carisma ciclópea que es Ron Jeremy, al que incluyeron en el ‘Hall of fame’ (algo así como concederle a una personalidad de Hollywood el Oscar Honorífico) cuando dijo al agradecer su premio: "He tenido relaciones sexuales con más de 4.000 mujeres pero solamente 9 lo admitirán".
Os dejo algunas instantáneas de la 'red carpet' aquí.
Por supuesto, una noticia como esta no podía faltar en el Abismo.

¿No quieres sopa? Pues toma dos tazas

¿Qué no tenemos suficientes adaptaciones de cómics? Pues venga, otra más. El tema es que cada día surge un nuevo rumor en las diversas páginas dedicadas al cine y al cómic sobre la enésima traslación de algún superhéroe de las páginas tebeísticas al celuloide. Y lo peor, es que el 90% de ellos se materializa. Y suelen hacerlo en filmes que, en muy pocas de las ocasiones, satisfacen las ilusiones de los seguidores del cómic adaptado.
Sin enumerar los proyectos que llegarán este año, los que se están ultimando y los futuros que atienden a intereses meramente comerciales, la última de estas adquisiciones por parte de Hollywood para inflar sus arcas manifestando con la masiva sustracción de ideas del noveno arte una peligrosa carencia de ideas es, nada más y nada menos, que ‘Luke Cage’, el nuevo cómic que será llevado a la gran pantalla por el afroamericano John Singleton (que no tuvo suficiente con mancillar a ‘Shaft’), que es lo debido cuando un producto tan específico como este está dedicado al enaltecimiento de un lector o público definido. ¿Qué quién es ‘Luke Cage? Pues un superhéroe de los años 70, que nació bajo el yugo de la rememorada ‘blaxplotation’, prorrumpiendo como señuelo de los editores de Marvel para cautivar a los lectores de color y granjearse así su buen dinero con cómics destinados para afroamericanos, cansados de que los denodados héroes del papel siempre fueran blancos y guapos. La serie de cómics protagonizada por Cage se destinó, además, a un público más adulto, por lo que a priori parecía un valor de transformación.
El hombre llamado Carl Lucas más tarde acabaría llamándose Luke Cage, un titánico fulano curtido a hostias en el guettos afroamericanos de Harlem, donde las bandas callejeras, las mafias, la corrupción y el dinero imponían su propia ley. Allí creció cometiendo todo tipo de delitos junto a su inseparable Willis Stryker. Pero un día su gran amigo Stryker le traiciona y Lucas acaba en la cárcel, jurando venganza por la muerte de la mujer que ambos amaban, Reva Connors.
En la cárcel un alcaide cabrón le promete la libertad condicional si aceptaba ser el sujeto del experimento. En vez de acabar con la vida de Lucas con un buen baño de productos químicos, produciendo una mutación en sus tejidos corporales que le dieron una fuerza sobrehumana. Así nace Luke Cage, un pedazo de toro rabioso que logra escapar de la prisión para impartir justicia y consumar su punición. Más o menos, ésa es la historia. Tradicionalmente, Luke Cage ha sido considerado uno de los personajes de ‘segunda división’ tanto por el mundo del cómic como por la editorial Marvel. Pero Cage tiene sus específicas y excepcionales peculiaridades que le desvían del héroe al uso, ya que en vez de luchar por el bien social, como un filántropo en pos de la humanidad, es un individuo que se vende al mejor postor siempre y cuando sus acciones sean justas y no atenten contra su conciencia.
Cuando la serie se agotó, se intentó revivir a Cage junto a un compañero llamado Puño de Hierro fundando una asociación llamada ‘Héroes de Alquiler’ con base en Chicago, primero con Puño de Hierro y después se unieron otros héroes como el Caballero Negro IV o el Tigre de Plata. Sin embargo, este ‘Power Man’ nunca tuvo éxito en la editorial y pasó desapercibido para los lectores. Pero no para todos, ya que es un cómic considerado de culto para muchos eruditos de los tebeos.

martes, 11 de enero de 2005

Han empezado las rebajas. Pero ¿de qué?

Imaginaos que un buen día quedáis con una de esas amiguitas que soléis conocer un sábado por la noche. Empezáis a salir con ella y la relación se consolida paulatinamente. Que si un cine por aquí, que si una cenita por allí, que si un poco de sexo por acá. Total, que os hacéis novios. Felicidad a corto plazo. Pero no todo es bueno cuando se sale en serio con una chica. Una de las cosas a las que estáis obligados casi por decreto femenino es a acompañarla a las rebajas. Tienda arriba, tienda abajo. Hartos y cansados de esta fatigosa labor, la invitáis a un café, por variar y detener su furor consumista. Se acerca el camarero y ella se pide un café cortado y tú… ¡una rallita de coca!
Lo sé, esto es imposible, ilógico, pero me sirve de perfecta excusa para introducir la noticia que a continuación os narro. No es que se haya radicalizado la expansión de ‘Coffe Shops’ a lo grande con todo tipo de alucinógenos por toda Europa, ni que se vayan a legalizar las drogas duras (no atienden a las blandas… como para imaginar esta posibilidad). Resulta que en el Reino unido, como en los demás países con la ropa de moda y demás tiendas, para superar la complicada cuesta de enero, la cosa de las drogas está de rebajas. Los ‘camellos’, como buenos mercaderes que tutelan su negocio, quieren ampliar su cuota de mercado y han rebajado el precio de los estupefacientes. Como suena, amigos. La oferta y la demanda se ha trasladado al mundo del hampa psicotrópica; de las rallas, de las pirulas, de los porros, de los bonguis… Así, ahora mismo, una raya de cocaína en Inglaterra cuesta mucho menos que un café ‘cappuccino’ ¡A precio de ganga, oiga!
Según un estudio elaborado por la Unidad Independiente de Observación de las Drogas, una dosis de 50 mg. de esta sustancia estupefaciente suele costar 2,25 libras (unos 3 € de aquí), menos que un café en muchos bares de la carísima capital británica. En 1995, un gramo de cocaína suficiente para 20 pequeñas dosis (vamos, las papelinas de toda la vida) costaba 56,66 libras, mientras que ahora puede adquirirse la misma cantidad por apenas 45 libras.
El estudio denuncia que todas las drogas alcanzaron el año pasado su precio más barato en décadas, en algunos casos con unas «rebajas» que alcanzan el 70 %. Es el caso, por ejemplo, de la heroína: hace una década, había que pagar 83,33 libras por un gramo que ahora apenas vale 26 libras. Mientras, una pastilla de éxtasis por la que un consumidor habría pagado 11,65 libras en 1995 cuesta ahora sólo 3,5 libras.
Los descensos en los precios de otras drogas son menos acusados, pero también significativos: en los diez últimos años, el precio de una roca de «crack» se ha desplomado en las calles británicas de 21,5 a 7,55 libras, mientras que el cannabis (ojo a esto) cuesta un 50 % menos. Veamos, para hacerme un poco el Quentin Tarantino con el sistema métrico, si hace una década un octavo de onza de hachís (venga, vale, es lo que equivalente a unos 3,5 gr.) costaba más de 20 libras, ahora a precio de calle te sale tirado, por unas 9,85 libras.
De todos los modos, desde el Abismo quiero advertíos de que la droga es mala… en grandes cantidades.
Bueno, os dejo que voy a ver si meriendo unas pastillas de crack, un poco de maría o un pelotazo de clorhidrato de coca.